Hasta el Partido Popular, bajo cuyo mandato se infló hasta reventar la burbuja inmobiliaria, admite que el modelo de crecimiento de Madrid en los últimos 15 años fue un disparate.
En el pasado otoño se cruzó la sentencia del Tribunal Supremo que convertía en suelo no urbanizable todos los barrios desarrollados desde 1997 (la mayoría, sólo sobre papel), entre ellos el nuestro de Arroyo Fresno II.
La Federación Regional de Asociaciones de Vecinos (FRAVM), enun intento de arreglar de manera constructiva, el desaguisado creado, ha trasladado al Ayuntamiento un documento de 250 páginas, en el que han colaborado la mayoría de las Asociaciones de Vecinos afectadas.
El documento, en primer lugar considera que la ciudad está “acabada en precario” y para ello propone mantener los ámbitos afectados por el Supremo como terreno no urbanizable, para rodear así la ciudad con un anillo verde. Respecto a la ciudad ya consolidada, la FRAVM apuesta por la mezcla social para “huir de la formación de guetos o de áreas residenciales muy homogéneas” en clase social y edad de sus habitantes, y porcentaje de extranjeros. Sobre “el problema de la vivienda”, propone eliminar barreras de acceso a determinados colectivos (jóvenes, rentas bajas), y mejorar las condiciones de habitabilidad (por ejemplo, instalando ascensores).